Las expectativas sobre el giro que podría tener la política del nuevo presidente de Estados Unidos, Joe Biden, hacia Venezuela, aumentaron hoy en medio del conflicto político y la crisis institucional que registra el país y la oposición reclamó miradas acertadas desde Washington.
Los dirigentes de la oposición, esperan que el nuevo mandatario norteamericano haga un «diagnóstico claro» de «la tragedia» de los venezolanos que claman por una transición hacia la democracia.
Mientras que el chavismo aspira a que Biden normalice las relaciones con el presidente Nicolás Maduro, desconocido por su predecesor Donald Trump tras las elecciones del 2018 consideradas «fraudulentas».
Omar González, diputado de la Asamblea Nacional electa en el 2015, afirmó que «confiamos en que la nueva administración de EEUU no se confunda con el régimen de Venezuela porque esto no es una dictadura de las tradicionales, militares».
«Esto es una intervención de potencias y organizaciones criminales nacionales y extranjeros que ocupan parte del territorio venezolano», aseveró.
González, miembro del partido Vente Venezuela, que coordina la líder María Corina Machado, opositora radical al gobierno de Maduro, enfatizó que «tiene que haber un diagnóstico claro de cuál es el régimen que sufre Venezuela para llegar a resultados concretos».
«En Venezuela hay un estado fallido y utilizar la herramienta de la democracia es parte de la locura, esto no sale de esa manera», afirmó.
En este sentido, sostuvo que «tenemos una enorme oportunidad para hacerle ver a la administración de Biden la necesidad de cuál es el camino correcto, para que no se sigan cometiendo los errores de subestimar a un país que llegó a ser referencia en la región y hoy está convertido en un problema hemisférico».
A su juicio, Estados Unidos debe estar, «como ha estado, al frente de la iniciativa internacional para buscar una solución al conflicto político» venezolano.

«Lo que se trata es de aumentar la presión interna y externa para que frente a los desmanes que comete el régimen haya una respuesta contundente de la comunidad internacional», puntualizó.
A su vez, Roy Daza, diputado a la Asamblea Nacional de mayoría chavista, electa en los cuestionados comicios del pasado 6 de diciembre, desconocidos por buena parte de la comunidad internacional, opinó que Biden, podría dar un paso adelante en la búsqueda de un nuevo tipo de relación política con Venezuela.
«El presidente Maduro, la Asamblea Nacional, Venezuela y sus instituciones, estamos listos para reanudar las relaciones diplomáticas con Estados Unidos en condiciones de respeto como deben ser», aseveró.
Destacó que Biden enfrenta tres «grandes retos» que son atender a la población por la pandemia del Covid-19, recuperar la economía estadunidense y «tratar de construir puentes donde Trump los dinamitó».
«Trump dinamitó puentes por todas partes y desarrolló una política exterior de agresividad», afirmó a una radio local.
Destacó que en ese marco hay que entender la posición única de Maduro que es alcanzar un «reordenamiento de nuestras relaciones diplomáticas y eso pasa por una posición nueva en Washington y en la Casa Blanca en relación a Venezuela».
Maduro pidió a Biden en la víspera, acabar con «la demonización» de la llamada revolución bolivariana, y que haga «una rectificación profunda» de las políticas que aplicó Trump.
«Hago un llamado a una rectificación profunda, a fondo y que el presidente Joe Biden tome el mando de la política de América Latina y Venezuela y abandone la demonización que ha hecho de la revolución bolivariana», dijo.
Las relaciones entre Caracas y Washington se han mantenido tensas desde el gobierno del fallecido Hugo Chávez (1999-2013).
Luego con la llegada de Maduro y de Trump al poder, alcanzaron su máximo nivel de discordia, con el incrementó sanciones económicas y la presión diplomática contra Caracas en febrero de 2019, luego de reconocer a Guaidó como presidente encargado de Venezuela, y a la Asamblea Nacional electa en 2015 como la única institución elegida democráticamente en el país.