El gobierno de Colombia acusa al venezolano por la invasión militar de su territorio, indica que dos helicópteros y unos 30 militares venezolanos se adentraron en su territorio el pasado domingo.
El vecino país, que comparte 2.219 kilómetros de frontera con Venezuela, señaló la incursión como «una violación de la soberanía».
Después del incidente, el presidente presidente Iván Duque, ordenó a la Cancillería colombiana la presentación ante la embajada de Venezuela en Bogotá «una nota expresando la más enérgica protesta».
La protesta fue emitida «en virtud del informe sobre los hechos que dieron cuenta de que efectivamente se evidenció una incursión militar no autorizada», relata infobae.
Un comunicado de la cancillería informa que los dos helicópteros estaban identificados con las siglas de la Guardia Nacional Bolivariana (GNB), y los militares, pertenecientes a la Fuerza Armada Nacional Bolivariana de Venezuela, desembarcaron en un sector conocido como Vetas de Oriente, en el municipio fronterizo de Tibú, departamento de Norte de Santander.
Este impase diplomático surge justo después de las acusaciones expresadas por el Presidente Nicolás Maduro, luego del atentado del que fue objeto y sobre el cual señaló al entonces presidente Juan Manuel Santos.
Tras otro incidente registrado hace un año, la Cámara de Representantes de Colombia pidió al Gobierno denunciar a Venezuela ante el Consejo de Seguridad de la ONU por las violaciones a la soberanía nacional colombiana.
Fuentes cercanas a la cancillería reportan que ese momento, se habían presentado al menos cuatro incursiones militares venezolanas en territorio colombiano.
Venezuela niega invasión militar
Por su parte, el gobierno nacional negó las acciones militares venezolanas en el territorio colombiano, indicando que se trata de un falso positivo.
Venezuela ha manifestado firmemente que no se ha realizado una incursión de ninguna clase, «así como ningún otro acto violatorio de la soberanía nacional del hermano país», dijo en un comunicado la Cancillería venezolana calificando esta afirmación como «un nuevo falso positivo».