Funcionarios de la administración del gobierno norteamericano indican que Washington descarta el diálogo con Nicolás Maduro.
Los medios locales indican que Estados Unidos planea aumentar multilateralmente la presión sobre el gobierno bolivariano y sus integrantes. Para ello trabajaran con sus socios globales, con miras a alcanzar una solución electoral a la actual crisis política en el país.
«Estados Unidos va a seguir aumentando la presión. Va a expandir esa presión de manera multilateral para asegurar que aquellos que son culpables de abusos a los derechos humanos, que están robando al pueblo venezolano, que están involucrados en una actividad criminal desenfrenada, realmente no tengan cuartel. en ninguna parte hasta que se sienten a la mesa en serio y tomen decisiones que conduzcan a elecciones libres y justas en el país «, reportan medios de comunicación citando a un funcionario.
El vocero también afirmó que la nueva administración estadounidense revisaría las sanciones unilaterales impuestas a Venezuela.
«Vamos a revisar las sanciones para asegurarnos de que sean efectivas porque el enfoque de las sanciones debe ser aumentar la presión sobre el régimen, eliminar cualquier tipo de acceso al capital corrupto para mantenerse, pero tampoco [un régimen] que penalice y castiga innecesariamente al pueblo venezolano y al país «, dijo el funcionario durante una sesión informativa el lunes. «Pero de nuevo … no hay prisa por levantar las sanciones».
El funcionario admitió que las sanciones unilaterales impuestas bajo la administración Trump fueron ineficaces y no han logrado el resultado electoral deseado en el país.
En ningún lugar del mundo, agregó la fuente, las sanciones unilaterales han conducido realmente a una transición democrática en ausencia de un enfoque multilateral entre la comunidad internacional.
Estados Unidos no participa en negociaciones bilaterales con Maduro. Con esta afirmación se descarta el descarta dialogo. Durante la conferencia telefónica, el funcionario de la administración estadounidense dijo que Estados Unidos no estaba participando en negociaciones bilaterales con el gobierno de Nicolás Maduro.
El funcionario estadounidense dijo que las negociaciones con Maduro han fracasado en el pasado y acusó a Caracas de usarlas como táctica dilatoria.
La administración Biden trabajará con socios globales, incluidos la Unión Europea y los países aliados de América Latina, para aumentar multilateralmente la presión sobre el gobierno de Maduro, dijo el funcionario estadounidense, y agregó que Venezuela se ha adaptado a las sanciones de la era Trump.
En 2018, Venezuela celebró una elección presidencial en la que ganó el presidente en ejercicio, Maduro. Estados Unidos no reconoció los resultados de las elecciones ni reconoció a Maduro como presidente legítimo e introdujo una serie de sanciones contra Caracas, que en gran parte afectaron la industria petrolera y la infraestructura empresarial de la nación.
Maduro acusó a Washington de trabajar con la figura de la oposición Juan Guaidó para derrocar al gobierno del primero como un medio para apoderarse de sus vastos recursos petroquímicos. Según un estudio de 2019 en coautoría del renombrado economista Jeffrey Sachs, las sanciones estadounidenses han resultado en la muerte de decenas de miles de venezolanos.