Con ideas innovadoras, un joven emprendedor Mexicano demostró que emprender y perseverar, son factores fundamentales para alcanzar el éxito.
Diego Cárdenas, director y fundador de Bamboocycles, encontró la forma de dar un toque diferenciador a un medio de transporte tan popular, como lo son las bicicletas, que de por sí ya es ecológico: construirlas con bambú.
Hace casi una década, Cárdenas, egresado de la carrera de Diseño Industrial de la Universidad Nacional Autónoma de México, viajó becado a Francia para tomar un curso de diseños tradicionales japoneses, donde el bambú se empleaba como materia prima de casi cualquier objeto, desde bardas y vasos, hasta puertas y ventanas.
“Cuando regresé de Francia por coincidencia vi que se fabricaban bicicletas de bambú desde finales del siglo XIX, entonces pensé: si en ese entonces ya se hacían, ¿por qué ahora no se podrían armar aún mejor que en aquella época? Desde ahí comencé a emplear todo lo aprendido en la escuela en este producto”, comentó Cárdenas.
Materiales locales y ecológicos
Las bicicletas que fabrica, están hechas con 85% de bambú proveniente de Yucatán, Quintana Roo y Veracruz. Este material desaprovechado en la zona, es inclusive considerado como una plaga, al no ser endógeno de la zona.
Sin embargo sus cualidades ecológicas lo hacen una excelente opción para el aprovechamiento de su madera, sobre la cual hay conocimientos ancestrales ya comprobados.
«Es costoso romper montañas para buscar minas o fundir piedras para obtener metales; el bambú crece continuamente y en grandes cantidades», afirma este diseñador industrial sobre sus bicicletas, las cuales empezó a construir en 2007.
El bambú, explica Cárdenas, resulta en una opción ligera y suave que es «dos veces más fuerte que el acero» y que absorbe «cuatro veces más vibración que la fibra de carbono».
La evolución de la bicicleta comenzó con la primera construida con madera en 1817 por el alemán Karl Dreis; en la Revolución Industrial (a partir de 1820), el metal sustituyó a la madera, y tras la II Guerra Mundial (1939-1945) se pasó a los plásticos.
La oportunidad que se les escapó a los Tiburones
El joven emprendedor decidió presentar su proyecto ante el grupo de empresarios mexicanos en el famoso programa Shark Tank. La experiencia fue intensa, pero los inversionistas no lo consideraron redituable, en su modo de hacer negocios.
Sin embargo, Diego Cárdenas no se dio por vencido, continuando en su esfuerzo y sin dejar de perseverar, ha alcanzado no sólo am mercados locales, sino a internacionales con su propuesta.
La creatividad y el trabajo, cuando se hacen en conjunto, permiten alcanzar las metas. Emprender y perseverar, es es la clave del éxito
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