Los países del G7 se comprometen a tomar «tan pronto como sea posible más medidas para aislar aún más a Rusia de nuestras economías y del sistema financiero internacional», revelaron en un comunicado.
El G7 «tomará medidas para eliminar el estatus de nación más favorecida de Rusia, revocando importantes beneficios de su membresía en la Organización Mundial del Comercio (OMC)». Así lo afirma una nota de los líderes del G7 publicada por la presidencia alemana.
«Estamos trabajando colectivamente para evitar que Rusia obtenga financiamiento de las principales instituciones multilaterales, incluidos el FMI, el Banco Mundial y el Banco Europeo para la Reconstrucción y el Desarrollo».
«Seguimos decididos a aislar aún más a Rusia de nuestros sistemas económicos y del sistema financiero internacional. En consecuencia, nos comprometemos a adoptar nuevas medidas lo antes posible», añadió el comunicado.
Por otro lado, el presidente ruso, Vladimir Putin, aseguró que los gobiernos occidentales están intentando “engañar” a los ciudadanos al culpar a Rusia y no a sus “errores de cálculo” de la escalada en los precios de la energía, ya que Moscú por ahora estaría “cumpliendo”.
“Nosotros estamos cumpliendo con nuestras obligaciones”, ha dicho el mandatario, durante una reunión en la que ha respondido a los mensajes que llegan desde Europa y que instan a “apretarse el cinturón” y “abrigarse más” para reducir la dependencia de la energía rusa.
Si los precios suben, “no es por nuestra culpa”, ha sentenciado Putin, en el marco de un mensaje que hace extensible también a Estados Unidos y que llega dos días después de que el presidente norteamericano, Joe Biden, anunciase un veto a la importación de gas y petróleo procedente de Rusia.
En este sentido, ha recordado que el peso de la energía rusa en el mercado estadounidense es “insignificante”. “Se esconden detrás de estas decisiones para engañar una vez más a sus propios población”, criticó Putin, según publican agencias de noticias rusas.