Culminó la semana santa en medio de la cuarentena, una de las tradiciones venezolanas con respecto a las pascua de resurrección es la quema de Judas, que marca la traición no solo a Jesucristo, sino a la gente que la sigue.
Esta tradición tiene un significado simbólico de justicia popular, pues a través de esta el pueblo expresa sus quejas y descontentos con relación a los acontecimientos políticos y comportamiento de figuras públicas y funcionarios del estado, de igual forma trata de dar finiquito simbólico a la cuaresma para garantizar su resurrección el próximo año.
El motivo original es recordar la traición de Judas a Cristo, y simbólicamente alude a la traición del personaje escogido para ser el Judas, a su pueblo, comunidad o hasta el país.
Cada domingo de Resurrección las comunidades escogen a un personaje, para mostrar particularmente el repudio a sus acciones.
Hoy, en medio de la cuarentena social vemos en las comunidades, el sentimiento de rechazo a la dramática situación del país, que ya estaba sumido en la peor crisis económica y social de la historia, complicada aún más por el coronavirus.
No por monedas de plata sino por Dólares
La falta de gasolina, ha sido opacada con la cuarentena social, sin embargo, pese a la orden de no salir a la calle, las colas en las estaciones de servicio para surtir la gasolina a los vehículos continúan.
En medio de esta situación, los abusos de la guardia nacional y los empleados de las estaciones de servicio son de conocimiento público. también lo es, por supuesto, la impunidad de estos actos de corrupción.
Así que estos Judas, que aprovechando la coyuntura, la necesidad y por supuesto de la autoridad conferida, traicionan al pueblo, al que deberían proteger y servir.
Con las medidas de confinamiento y la prohibición de la salida a la calle, es más sencillo para estos traidores el cometer sus fechorías, en detrimento de la vida y derechos de los venezolanos.
A diferencia del antiguo apóstol, éstos no muestran ninguna señal de arrepentimiento.