Siguen sin solución los casos asociados a la estatal petrolera, pasa el tiempo y ningún caso ha terminado en un cierre judicial, mientras tanto la plata de PDVSA sigue de viaje en los paraísos fiscales.
Desde 2016, cuando salta a la palestra el escándalo de los Papeles de Panamá, un pequeño capítulo de esa historia le pertenece a los venezolanos, que siguen esperando la repatriación de la plata de PDVSA.
A partir de diciembre del 2017 y hasta enero de 2018, se desarrolló una cacería de brujas en todas las instancias de PDVSA. Fue entonces cuando se habló públicamente de los cientos de millones de dólares que se esfumaron en paraísos fiscales.
En ese entonces nos enteramos de que directivos de la estatal petrolera, estaban metidos en el tráfico de influencias por venta de contratos con nuestra compañía insignia, licitaciones y demás laberintos administrativos.
Con desparpajo y poco decoro se esfumó, gran parte de el dinero que PDVSA produjo y que debió, de alguna manera, ser retornado al país.
La Suma es exorbitante, pero de la punta del iceberg, solo se han podido descubrir, unos 350 mil millones de dólares que han ido a reposar en zonas de libre tránsito de dinero, como Panamá, Suiza, San Vicente y las Granadinas, Bermudas, España, Andorra, EE.UU. y Curazao.
La noticia sorpresa
Nunca nos hubiéramos enterado de lo que pasaba en PDVSA, hasta que con el destape de los Panamá Papers, salieron a la luz pública la participación de altos personeros de muchas grandes compañías a nivel mundial, tenían las manos metidas en un movimiento que planteando la evasión de impuestos, se prestó para el blanqueo de capitales.
Durante la investigación y posterior acción judicial, saltaron muchos conejos de la chistera, nombres de venezolanos y sus asociados o asesores extranjeros fueron relacionados con el escándalo.
En ese entonces se barajaron muchos nombres y de esos nombres podremos encontramos algunos a los que se les pudo demostrar su culpabilidad, otros que, estando confesos, se escaparon de las manos de la justicia y uno que otro que estaba en el lugar y momento menos indicado.
De los nombres más conocidos está el de Rafael Ramírez, expresidente de PDVSA; Luis Carlos León Pérez, exdirector de Finanzas de Electricidad de Caracas; Francisco Antonio Jiménez expresidente de Bariven; Nervis Villalobos, exministro de Energía y Petróleo de Chávez; Luis Parada, exgerente de PDVSA, Eudomario Carruyo, Diego Salazar, Javier Alvarado Ochoa y algunos otros exgerentes que han sido investigados y algunos otros que aún siguen bajo la lupa de la ley y hasta Julia Van Den Brule, jefa de la filial ibérica de la petrolera venezolana.
¿Y la gente? ¿Y la plata de PDVSA?
De los más altos personeros, sólo se sabe que Ramírez está prófugo de la ley, escudado en los EE.UU. León fue detenido en España y extraditado a los Estados Unidos; Jiménez fue puesto a la orden de los tribunales venezolanos.
Por otra parte, Nervis Villalobos está en custodia del Gobierno americano, luego de haber sido apresado en Madrid. Diego Salazar está en prisión desde diciembre del 2017.
A otros se les perdió la pista, como es el caso del ex funcionario Javier Alvarado Ochoa.
Quien no se ha ocultado es Carruyo, quien ha logrado salir de sospechas al haber demostrado que no participación en los delitos de los que se le imputa.
A diferencia del caso de Van Den Brule, quien sigue siendo investigada y cuya defensa no ha sido posible debido a las pruebas en su contra.