La producción petrolera ha caído casi a 1,4 millones de barriles de petróleo por día, el nivel más bajo en siete décadas. El ex presidente de PDVSA Rafael Ramírez predice que a menos que Maduro cambie su rumbo, se podría llegar pronto a 900,000 barriles por día.
Según Ramírez, la mayor parte de este crudo se vende a nivel nacional con una gran pérdida para el país o se usa para pagar deudas con China y Rusia.
Ramírez hizo mención, en una nota publicada por El Tiempo y recogida de AP, de que un reciente decreto firmado por el presidente Maduro, da al presidente recientemente instalado de Petróleos de Venezuela, general de división Manuel Quevedo, “poderes especiales para reescribir los términos de las empresas conjuntas de PDVSA con compañías petroleras extranjeras”, lo que le permite eludir la supervisión constitucional de sección de la Asamblea Nacional controlada por la oposición.
Señala en la entrevista además que “hay un clima de terror en PDVSA y todos tienen miedo de tomar decisiones”
Rafael Ramírez niega alegatos de corrupción
El pasado mes de enero, el fiscal general de la república, Tarek William Saab dijo que arrestaría a Ramírez por presuntamente tener participación en la venta ilegal de crudo.
Algunos allegados al exfuncionario, entre ellos su sobrino, han sido aprehendidos. También dos exfuncionarios fueron arrestados en España durante el año pasado, siguiendo una orden de aprehensión de Estados Unidos que forma parte de una investigación encabezada por fiscales en Houston.
Estos funcionarios apresados en Europa fueron acusados por corrupción en PDVSA durante el periodo que Ramírez era el presidente de la petrolera.
Ramírez negó esas acusaciones y manifestó tener la consciencia limpia. Informó que desde que salió de Estados Unidos, ha vivido en diversas ciudades y evitando regresar a Venezuela por temor a ser arrestado.
Dijo en la entrevista: “Sí me duele porque la industria la ha denigrado Maduro, usando la corrupción como una excusa para tomar control de PDVSA”.
El expresidente de PDVSA opina que ninguna de las personas en la dirección actual de PDVSA tiene verdadera experiencia en la industria petrolera y aunado a la salida de miles de ingenieros petroleros, esta compañía que es la fuente de casi todos los ingresos de Venezuela está realmente en grave peligro.
Ramirez señala que la incompetencia de la actual administración se evidencia al no haber podido superar los intentos de ConocoPhillips, con sede en Houston, de cobrar un laudo arbitral de 2.000 millones de dólares, obligando a PDVSA a sacar sus barcos petroleros de las instalaciones propiedad de la petrolera en el Caribe holandés previendo decomiso.
Rafael Ramírez comentó dijo que en el pasado el enfrento acción legal similar de Exxon Mobil en el Reino Unido.
“Lo sorprendente, y que preocupa, es que PDVSA no haya anticipado esto”, declaró. “Si las acciones de una sola empresa ponen en jaque a todo un país, imagínate cómo serán las tan anunciadas sanciones de Estados Unidos”.