Con quejas contra la Onapre y al grito de «y cuál revolución, si este gobierno es hambre, miseria y corrupción», trabajadores del sector educación, salud, y otros gremios de la administración pública, junto a pensionados jubilados, tomaron hoy de nuevo las calles de Caracas, pero esta vez con la denominada «Marcha de las ollas vacías».
Los manifestantes se concentraron al frente de la sede del Ministerio Público, donde consignaron un documento en el cual exigieron respeto a sus derechos.
Luego, con pitos, banderas, y sonando cacerolas avanzaron por la céntrica avenida Bolívar hasta las adyacencias del ministerio del Trabajo, en pleno centro capitalino.
Aquí también entregaron un escrito a Francisco Torrealba, ministro de Trabajo, instándole a que se pronuncie y atienda los reclamos de la clase trabajadora.
En su recorrido alzaron su voz para rechazar la política laboral de Maduro, condenar el «macabro» instructivo de la Oficina Nacional del Presupuesto (Onapre) que «nos roba nuestros sueldos», y exigir el pago completo de los bonos: vacacional y recreacional, entre otros beneficios contractuales.
Roberto Carpio, jubilado del Instituto de Previsión y asistencia Social del Ministerio de Educación, se movilizó con un hueso en sus manos para mostrar «el hambre que estamos pasando por culpa de este gobierno que nos ha llevado a comer huesos, paletas, carapachos porque el sueldo no alcanza para más».
«Este gobierno nos tiene el derecho a la alimentación conculcado con un instructivo macabro que no es solo la Onapre, es también todo lo que viene hacendó este gobierno porque decir Onapre es decir Maduro», dijo en medio de la protesta a los periodistas.
Carpio exigió el pago completo del bono recreacional, «que es a 85 días de sueldo integral (ingreso más bonos de alimentación) y no como pretenden pagarlo a razón del sueldo mínimo, y en tres partes, tarde, jamás y nunca».
A su vez, Yuri Sanz, del sindicato de empleados públicos del estado Miranda, rechazó que «a golpe y porrazo el gobierno de Maduro creo un instructivo que perjudica a la clase trabajadora, fuera de los problemas que ya teníamos y el Covid que no se ha acabado, pero el gobierno no da los insumos para proteger la vida de los trabajadores».
«Es el robo que nos hicieron con los benéficos laborales y el robo que le quieren seguir haciendo a los jubilados.
Venezuela no se ha arreglado y tú que eras un presidente y qué obrerista lo sabes. Aquí está la clase obrera protestando contra ti porque tú no quieres cumplir con los acuerdos que se hacen», enfatizó.
Asimismo, Julieta Pineda, educadora activa, rechazó «la cancelación chucuta del bono vacacional», y criticó al Estado que «sigue haciendo de las suyas con nuestro dinero, sin importar que con esto nos condena al hambre y la miseria».
«Estamos luchando por un salario digno que nos permita al menos comprar la canasta básica, que nos respeten nuestras contrataciones, que nos paguen nuestros bonos como debe ser, y que se derogue ese nefasto instructivo de la Onapre que nos robó nuestras reivindicaciones», aseveró.
Luis Cano, representante de los jubilados y pensionados, afirmó que la marcha fue todo un éxito, y apunto que «seguiremos en las calles reclamando lo que nos corresponde por derecho».
«Está demostrado que juntos somos más fuertes. Los trabajadores activos y jubilados seguimos en la calle para exigir que no sigan metiéndonos la mano en el bolsillo, las ollas de nuestra casa están vacías», puntualizó.
Los trabajadores se mantienen desde hace semanas en las calles reclamando sueldos dignos, pagos completos de sus beneficios contractuales y respeto a las contrataciones colectivas.
La protesta se replicó de forma pacífica en los estados Portuguesa, Falcón, Bolívar, Trujillo y Mérida, y de acuerdo con los organizadores, este jueves volverán a las calles en defensa de sus reivindicaciones.