Trump y Maduro hablaron de sus logros en materia económica durante sus intervenciones ante la Asamblea de la ONU.
Pese a lo opuesto de sus visiones y políticas, Donald Trump y Nicolás Maduro presidentes de Estados Unidos y Venezuela han tomado polémicas y complicadas decisiones para reconducir las economías de sus respectivos países.
Ambos buscan la reactivación de los aparatos productivos de sus respectivas naciones, claro está cada cual desde su enfoque particular.
Mientras Trump, quiere traer de vuelta la producción manufacturera hacia los Estados Unidos, retomando las añoradas épocas de las décadas de los años 50´s a los 70´s que generaban grandes cantidades de puestos de trabajo en el país norteamericano, Maduro busca detener el grave proceso hiperinflacionario que sume al país en una profunda crisis.
El presidente venezolano, acaba de implementar una reconducción económica, que en primer lugar basa el respaldo de la moneda en los recursos minerales del subsuelo nacional y al Petro, la criptodivisa creada y respaldada por la nación suramericana.
La idea es que este cambio de base a un cambio de paradigma económico y permita también realizar la reactivación del aparato productivo, permitiendo la inversión en la nación venezolana y la generación de empleos que respalden el florecimiento de la industria y el comercio nacional.
Los frutos de estos esfuerzos fueron manifestados tanto por Trump como por maduro en sus alocuciones ante la plenaria de 73ª sesión de la Asamblea General de la ONU .
Trump dijo la economía de EE.UU. en solo dos años de su administración se había fortalecido. Dijo «En menos de dos años, mi administración ha logrado más que casi cualquier otra en la historia de nuestro país». Sin embargo ha abierto frentes de guerra comercial que prometen encarecer los precios del mercado.
El comentario desató risas de la audiencia y del propio Trump, que dijo tras los comentarios en redes sociales y medios de comunicación: «No se rieron de mí. Se rieron conmigo».
Maduro, tras hacer una serie de planteamientos referentes a Venezuela, dijo: «traemos buenas noticias de un país que no se ha rendido ni se va a rendir»
Habló también sobre “el esfuerzo de recuperación económica precisamente activado durante el mes de agosto un programa de recuperación económica crecimiento y prosperidad que está logrando posicionar las bases de una economía nueva no dependiente de la renta petrolera, una economía diversificada de crecimiento sostenible y de construcción de la prosperidad rumbo un modelo social de nuevo tipo”.
Este sistema también tiene mucho que probar, sólo en un mes no se puede hablar de resultados, sino de planes a futuro, los comentarios no generaron risas y aunque hubo aplausos para el discurso, hay escepticismo en cuanto a la economía venezolana.