Más de 1,2 millones de dosis de insulina, provenientes de Rusia, llegaron esta semana a Venezuela, en el marco de un acuerdo alcanzado entre ambas naciones.
De esta forma, se brinda asistencia a pacientes venezolanos que requieren de estos medicamentos, y que se encuentran imposibilitados de obtenerlos, debido al bloqueo económico estadounidense que le impide a Venezuela acceder a mercados internacionales para su compra.
Se trata del segundo cargamento de este tipo que ingresa al país en 2022, y se espera que el próximo envío se realice en el primer trimestre de 2023.
Además, los dos países analizan implementar de manera conjunta la producción nacional de insulina en el territorio venezolano. «Lo más importante [es] que el año pasado fue concluido el acuerdo entre ambas partes para realizar una producción nacional aquí, en terreno venezolano, junto con la empresa venezolana Espromed Bio», declaró el embajador ruso en Venezuela, Serguél Mélik-Bagdasárov.
Cabe recordar que la cooperación en este ámbito se inició entre las dos naciones en 2019, y hasta el momento, según las autoridades venezolanas, cerca de 3 millones de dosis han llegado al país.
El pasado 11 de octubre, el canciller venezolano, Carlos Faría, sostuvo una reunión con su homólogo ruso, Serguéi Lavrov, en Moscú, en la que revisaron los avances de los proyectos bilaterales, al tiempo que se comprometieron a elevar el nivel estratégico de las relaciones diplomáticas entre ambas naciones.
Los dos países han preparado varios acuerdos que firmarán entre los días 13 y 14 de diciembre, en Caracas, durante una reunión de la comisión intergubernamental de alto nivel (CIAN) que conforman ambas naciones, informó la Cancillería el pasado 13 de octubre.