El mundo celebra el 100ª aniversario del nacimiento de Nelson Mandela, un hombre que dejó un legado de amor y perdón y que dedicó su vida a sanar a su país, fragmentado por el odio y la desigualdad.
Nadie nace odiando a otra persona por el color de su piel, o su origen, o su religión. La gente tiene que aprender a odiar, y si ellos pueden aprender a odiar, también se les puede enseñar a amar, el amor llega más naturalmente al corazón humano que su contrario.
Nelson Mandela. Largo Camino a la Libertad 1995
Nelson Rolihlahla Mandela Nació en Mvezo, Unión Sudafricana el 18 de julio de 1918 y falleció en Johannesburgo, Gauteng, Sudáfrica el día 5 de diciembre de 2013.
Este gran hombre fue un abogado, activista contra el apartheid, político y filántropo. Fue presidente de Sudáfrica entre 1994 y 1999.
Fue el primer presidente de Raza negra en su país y también el primero en resultar elegido por sufragio universal.
Su gestión de gobierno se enfocó en deshacer la estructura social y política heredada del apartheid a través del combate del racismo institucionalizado, la pobreza y la desigualdad social, y la promoción de la reconciliación social.
Como nacionalista africano y marxista, presidió el Congreso Nacional Africano (CNA) entre 1991 y 1997, y a nivel internacional fue secretario general del Movimiento de Países No Alineados entre 1998 y 2002.
Ejemplicó con acciones todo aquello que profesaba y dió el primer paso para detener una espiral de odio que consumía a la nación africana.
Su labor continúa en aquellos que le suceden y todavía están por verse los frutos que su paso por este mundo ha dejado. Hay un gran camino por recorrer para que las relaciones humanas dejen de basarse en las diferencias y partan de aquellas que nos hacen humanos a todos los seres que habitamos en este planeta y nos permite llamarnos seres humanos.
Mandela es una fuente de inspiración para todos aquellos que aspiran un mundo mejor. Gracias Madiba, por tu siembra de amor y por el coraje que nos enseñaste de cara a las adversidades que venciste en nombre del bien de la humanidad.