Al menos dos personas lesionadas, dos viviendas destruidas y 101 más con algunos daños, además de árboles caídos es el balance que dejó el paso del huracán Julia por la isla colombiana de San Andrés, informó este domingo el presidente, Gustavo Petro.
«El paso del huracán por San Andrés dejó daños leves. Dos lesionados, dos viviendas destruidas, 101 averiadas. Su paso por Providencia fue más leve. Apenas se restablezcan las operaciones aéreas llegarán las ayudas», escribió el mandatario en un mensaje de Twitter.
El fenómeno climático se dirigía hoy hacia las costas de Nicaragua, a una velocidad cercana a los 26 kilómetros por hora y vientos sostenidos de 125 kilómetros por hora, de acuerdo a la descripción hecha por el Instituto de Hidrología, Meteorología y Estudios Ambientales (Ideam).
Julia se transformó durante la semana al pasar de «depresión tropical 13», a «tormenta tropical Julia» y luego en huracán, debido a su tamaño y a la fuerza de los vientos de su cuerpo en forma de cono.
Poco antes de tocar tierra durante la madrugada de este domingo en la isla de San Andrés, las autoridades cambiaron su condición de tormenta tropical a huracán, dada la fuerza de sus vientos que pasaron a ser de 120 kilómetros por hora.
Sin embargo, fue precisamente el hecho de que esa transformación se dio a muy poca distancia de arribar al archipiélago lo que redujo la gravedad de los daños.
«Al pasar, estaba en ese tránsito de tormenta a huracán si hubiese sido antes, por supuesto que hubiera ido con mucha más fuerza; porque él cuando se convierte rápidamente aumenta la velocidad de los vientos sostenidos y la presión atmosférica baja considerablemente», explicó Yolanda González, director de Ideam.
Tras el paso del fenómeno por San Andrés las autoridades desactivaron este domingo la «alerta máxima» que se instaló desde la noche del viernes y la redujeron a «advertencia», aunque se advirtió que aún pueden formarse vientos súbitos de hasta 30 kilómetros por hora, como parte de la estela que deja el enorme remolino de agua y aire que forma un huracán.
El Ideam avisó que al menos hasta mañana se mantendrá el temporal de lluvias que desde hace varios días azota a buena parte de los departamentos del norte del país.
Las autoridades portuarias también mantuvieron la restricción para el tránsito de embarcaciones en el Mar Caribe dada la persistencia de olas de hasta cuatro metros en altamar.
En tanto que los vuelos aéreos hacia el archipiélago también se mantendrán temporalmente suspendidos hasta que las condiciones permitan su reactivación, explicó Javier Pava, director de la Unidad Nacional de Gestión de Riesgos y Desastres (Ungrd).
Pava alistaba su viaje desde Bogotá hacia San Andrés en el primer vuelo que preparaba esta mañana la Fuerza Aérea Colombiana con ayudas humanitarias para ser distribuidas entre las personas afectadas por los daños en sus viviendas.
El funcionario dijo que el país debe acostumbrase a la presencia de los huracanes en el Mar Caribe colombiano, luego de lo ocurrido este fin de semana con Julia y lo sucedido en 2020 cuando Iota, que destruyó la isla de Providencia, ubicada en ese mismo archipiélago..
«Esto se va a volver mucho más frecuente, mucho más recurrente el paso de huracanes», afirmó Pava, quien sostuvo que «en este nos fue bien en el tema de la respuesta, pero lo podemos hacer mejor».